La Rioja presentó en sociedad la Ruta del Olivo.

Desde el corazón de la producción olivícola argentina, la provincia desarrolló un programa de medidas que apuntalan el cultivo y sus derivados.

Departamento de Arauco, municipio de Aimogasta, lugar donde la producción de aceitunas y derivados se impone desde hace años. Con desafíos importantes y círculos para contener a productores, industria y técnicos, la provincia lanzó la “Ruta del Olivo”.

La importancia de la aceituna en la región no es menor, incluso contando con una variedad propia que es la llamada “Arauco”, un poco más grande, carnosa y poco utilizable en la confección de aceite. Tanto sean de mesa o para aceite, este producto de origen europeo busca posicionarse como una de las economías regionales importantes en nuestro país. Es por esto que La Rioja presentó esta novedad, en conjunto con el Concejo Federal de Inversiones. La Rioja es el corazón olivícola que late recostado entre cordones montañosos y el árido.

La Rioja posee 27.000 has de superficie implantada, alcanzando 180 mil toneladas de cosecha anual, logrando la mayor producción del país en plantaciones bajo cultivo de olivo, por lo que convierte a la provincia en la primera productora de aceituna de mesa y exportadora de aceite de oliva de Argentina, siendo el epicentro de lo que se conoce como país olivícola, integrado también por Catamarca, San Juan y Mendoza.

La puesta en marcha de un Clúster empresarial, permite a los Gobiernos sentar precedente en la decisión de buscar diseños y programas de apoyo para los diferentes giros de negocio a potenciar, lo cual implica interacción, diálogo y consenso en la priorización de tópicos, organización productiva y modalidad de trabajo. Participan activamente a través de organizaciones e instituciones representativas los productores, empresarios, trabajadores, proveedores, comercializadores, profesionales, técnicos, y otros involucrados en el proceso productivo.