UN GRUPO DE ACREEDORES DE VICENTIN RECHAZA LA PRIMERA PROPUESTA DE LA EMPRESA.
Se trata de unos 150 damnificados, agrupados en el grupo “Sumando Cabezas”. Objetan que no hay garantías para el cobro sin un nuevo plan de negocios, que por ahora no aparece.
La primera propuesta que Vicentin dejó trascender respecto al pago de su deuda no cayó bien entre los acreedores que integran "Sumando Cabezas", el grupo que productores y acopios conformaron para aunar criteros de cara a una futura negociación con la aceitera.
"No encontré ningún miembro que diga que le haya parecido buena la propuesta", consignó Nicolás Galli, designado como vocero del grupo, cuyo número viene in crescendo a ritmo vertiginoso y ya lograron superar los 150 damnificados.
Hay varios puntos que objetan de la fórmula presentada por Vicentin: la escasez de garantías sobre el pago del saldo de la deuda más allá del primer anticipo, la falta de un plan de negocios a mediano y largo plazo y la informalidad con la que se lanzó la propuesta.
Respecto al primer punto, entienden que la aceitera rompió ese necesario pacto de confianza que alcanza la mayor parte de los negocios agropecuarios a principios de diciembre, cuando decidió unilateralmente cesar los pagos a su cadena de proveedores.
Ello viene concatenado con el segundo ítem. Es que en su jugada del viernes Vicentin no mostró todas las cartas y retaceó información sobre cuál era su estrategia para poner en marcha las plantas, más allá de ofrecer un plus a los acreedores que le vendan granos en los próximos 6 años.
A la fecha solo se conoce -extraoficialmente- que Molinos, AGD, Bunge y Dreyfus le darán algo de oxigeno al brindarle unas 100 toneladas de girasol para que Vicentin muela en el complejo indutrial que tiene sobre la A012, en el límite entre San Lorenzo y Ricardone.
La falta de información oficial -Vicentin volvió a emitir un comunicado el pasado viernes tras más de un mes de silencio, pero enfocado a su relación con el Banco Nación- es otro de los puntos que critican desde "Sumando Cabezas". En este sentido, algunos miembros del grupo dijeron que solo iban a dar una respuesta certera cuando aparezca "una nota formal y no simplemente un WhatsApp".
Es que si bien no fue desmentido, nadie del directorio de la empresa ratificó esa primera propuesta difundida el viernes, consistente en dolarización de las acreencias, abono de un anticipo cercano al 20% y un plan de pagos de hasta 8 años (que se reduce a 6 para quienes sigan entregando mercadería).
"Parece una tomada de pelo. Quizás consigan los números, pero luego no se si podrán conseguir la mercadería. Esto es como un banco que te hace el corralito y después pretende que le sigas depositando plata. En este caso, que le sigas depositando mercadería", confió en estricto off un integrante de "Sumando Cabezas".
Los cerca de 150 acreedores que conforman el grupo tienen montos por cobrar que en todos los casos superan los 30.000 dólares, que es el tope que Vicentin fijó para pagar las deudas de una sola vez. Según dejó trascender la empresa, están en esta condición unos 1.300 proveedores.
Para homologar un Acuerdo Preventivo Extrajudicial (APE), deben prestar su conformidad la mayoría absoluta de acreedores que representen por lo menos dos terceras partes del pasivo quirografario total.
