EN LA MUNICIPALIDAD DE ESPERANZA HUBO PASES DE TRABAJADORES Y TRABAJADORAS A PLANTA PERMANENTE
- lanoticiaprimero
- 25 jun 2021
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Existen pocas cosas en la vida de un dirigente gremial y su Organización que no lo llene de mayor satisfacción que ver cómo las trabajadoras y los trabajadores que representamos pueden alcanzar la seguridad de disfrutar de sus derechos, pues, ahí reside la garantía del derecho al bienestar. Seguridad y bienestar son valores que aspira legítimamente tener todo ser humano. Claro, en ello se afinca el proyecto de vida de la persona que trabaja, ahí se consuma también el núcleo más íntimo de los sentimientos humanos: compartir la realización con su familia de darle una vida digna. Qué enaltecimiento más encomiable para los deseos de una trabajadora y un trabajador que su vida destinada al trabajo no es en vano. La seguridad social, el derecho a la protección integral de la familia, al salario digno, vacaciones pagas, estabilidad del empleo público, la irrenunciabilidad a la jubilación y pensión, con haberes móviles, esa lucha de la clase trabajadora que empezó cuando se formó como clase a mediados de 1800 y aún en el Siglo XXI seguimos luchando para conquistar derechos que la más de las veces demoran en consagrarse, pues, algunos de los que mencioné son del Siglo pasado, vale decir: la Justicia Social.

Siento la felicidad que cada uno de ustedes, compañeras y compañeros, están gozando en este momento trascendente en sus vidas y nos da cierto orgulloso por nuestro trabajo, ver que tampoco es en vano la lucha.
De ahí que, debemos agradecer a la Intendenta y sus secretarios que hayan hecho posible este anhelado instante por el que hemos bregado desde hace tiempo y mediante el insistente diálogo pudimos plantar el retoño que, permítaseme la ironía, floreció en pleno otoño.
Ahora, digo que el orgullo que sentimos no es pleno porque quisiéramos dar por tierra con que existan compañeras y compañeros que vean postergados sus derechos y nos encantaría que todas y todos ellos estuvieran acá compartiendo la misma felicidad. Pero es lo que se pudo lograr.
La APM ha tenido una etapa de mucha resistencia en el tiempo reciente, pero desde que obtuvimos el Fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que nos dio la razón sobre el ilícito aporte solidario hemos renovado nuestras fuerzas, porque durante doce años dijimos que era inconstitucional. Tenemos autocrítica y sabemos que la organización ha cometido errores, todos los días buscamos reivindicarnos y ganar el respeto que debemos tener, pero haber ganado en Soberanía, Autonomía e Independencia para elaborar nuestro programa de acción nos revitaliza y nos da mucha fuerzas que vamos acumulando para pasar de la etapa de la resistencia, que ya dejamos atrás a la de la realización de objetivos que ponemos a la altura de lo que debe ser una administración para aspirar a desarrollarse en el S XXI. De suyo que nosotros hemos aprendido la sabiduría del viejo dicho popular: QUE NADA ES ETERNO, ya ha quedado demostrado, que la lucha por la verdad y la justicia lleva su tiempo porque utilizamos las armas de la Ley pero lo vamos a lograr. Puedo asegurarles que los que quieren tapar el sol con la mano sólo podrán cegarse de la luz que la justicia más temprano que tarde va a irradiar. Abrazamos una CAUSA: cumplir con engrandecer a la APM, con el esfuerzo de los afiliados, los que resistieron y los que llegan, su tradición de 75 años, una organización que lucha por una administración del Siglo XXI. Lo dije en el acto de celebración de los 75 años de nuestro sindicato: “los que hacen el crecimiento de las ciudades son las y los trabajadores municipales con su trabajo, pero nunca vemos el reconocimiento en las placas de las obras que se inauguran un humilde homenaje o al menos una mención en los discursos”.
El derecho a la estabilidad del empleado público es una consigna de nuestra organización porque es un derecho humano constitucional y no es aceptable que quede en manos de una lapicera porque es un derecho de la persona humana a lograr la seguridad y el bienestar. Pero que comprende la sana administración. Estamos convencidos que esa práctica pertenece a otro Siglo, otros paradigmas, que en el Siglo XXI aparece inaceptable. También la carrera escalafonaria que hay que regular de otro modo porque la que contiene la Ley 9256 y la 9286 también pertenecen al otro Siglo. Solo sepan que más temprano que tarde habrá que ingresar al Siglo XXI y lo vamos a lograr porque es el objetivo de nuestra CAUSA con la solidaridad de todas y todos nosotros trabajando mancomunadamente. No nos olvidamos del derecho a los concursos en la carrera administrativa que son parte del esquema del Siglo pasado y es imperioso adaptar a la nueva era en el marco de una revolución tecnológica. NO, no se puede tapar el sol con la mano y como el tiempo no se puede detener… hagámoslo correr.
Sólo deseo que los beneficiados disfruten el placer de este momento irrepetible en sus vidas y compartan tanta alegría con sus seres queridos es el deseo de Dario Demaria, Secretario General de A.P.M.







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